Amanece en Bratislava y suena el despertador unas cuantas veces antes de que lo apaguemos dando paso a un nuevo día. Vamos a buscar algo para desayunar, complicado pero por fin damos con una tiendecita que nos suministra algo que echarnos al estómago.
Tras coger energías salimos en busca de un supermercado a comprar agua y algún que otro alimento. Salimos de Bratislava y ponemos rumbo a Gyön a buen ritmo pensando en la larga jornada que nos queda por delante. Pasamos varios pueblos Čunovo, Rajká, Bezenye, Mosonmagyaróvár, Arak, Hédervár, Dunaszeg y Györújfalu.
Pensábamos que íbamos a tener un día tranquilo en cuanto a agua se refiere pero el tiempo nos obliga a ponernos y quitarnos el chubasquero varias veces hasta que acaba descargando una importante tormenta que hace que Merida suba el kilometraje a 25-26 km/hora para sorpresa de Scott sorteando baches y charcos para llegar lo más rápido posible.
Por fin alcanzamos nuestro destino, buscamos hotel para descansar no sin alguna dificultad ya que nuestra llegada coincide con un festival Infantil que llena la pequeña ciudad de Györ de familias con niños. Tras un paseo observando las innumerables actividades infantiles y una tranquila cena finalizamos el día.
A descansar!!!
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